El entorno del río Ripoll –que serpentea Sabadell a lo largo de siete kilómetros- ha mejorado mucho en los últimos 20 años. El agua se ha regenerado gracias al sistema de plantas depuradoras municipales, con lo que vuelven a haber peces, patos y varias aves comunes como el martín pescador. Con la ordenación de los caminos y de las zonas de huerta, el Ripoll se ha convertido en un espacio agradable para el paseo, las excursiones y el deporte, tanto en bicicleta como a pie. Pero, según reconocen desde l'Associació per l'Estudi i Defensa de la Natura (Adenc), aún hay flecos que mejorar desde el punto de vista ecológico.
De ahí que en 2009 la entidad ecologista impulsase el proyecto Fes reviure el Ripoll! con dos objetivos claros: reintroducir la vegetación y la fauna fluvial originales entre la zona de Sant Vicenç de Jonqueres y el molino del Amat e implicar en la causa ambiental a tantos voluntarios como pudiesen, según explica la presidenta Marta Fernández. Durante tres años, un equipo técnico ha movilizado a 2.500 voluntarios –entre escuelas, casals, asociaciones vecinales y entidades varias– con el que han conseguido recuperar la vegetación autóctona de ribera y eliminar las especies invasoras en cuatro hectáreas de superficie en la citada zona.
Con una subvención de 58.000 euros del ACA y una ayuda de 25.000 euros de Unnim, han plantado más de 15.000 unidades de 45 especies diferentes -entre arbustos, árboles y plantas–, han expulsado la caña americana y han conseguido evitar la pastura de un ganado de cabras en la zona, que se almorzaban todo lo plantado.
En los últimos meses, las acciones se han focalizado en la recuperación de fauna y en la adecuación de cinco balsas temporales para potenciar la población de anfibios y de un pequeño refugio acuático para peces y reptiles.
Para dar visibilidad al proyecto y buscar nuevos voluntarios, Adenc ha organizado para el domingo 22 una fiesta en la zona de ocio de Sant Vicenç de Jonqueres, desde las 9 de la mañana hasta las 13.30 horas. A primera hora de la mañana hay previsto un itinerario ornitológico por el río, a las 10 comienza la plantación en las citadas balsas y a partir de las 10.30 horas arrancan las actividades infantiles. A lo largo de la mañana se podrá ver la exposición sobre los avances ambientales obtenidos a lo largo de tres años de trabajo. A las 11.30 horas comenzará la xocolatada popular, a la que seguirá la actuación del payaso Pau Pèrrim Pèssim, el baile de gigantes y la actuación de una coral.
Marta Fernández anima a la ciudadanía a que se implique en este proyecto porque todavía queda trabajo por hacer: “Se pueden adoptar tramos del río y cuidar y regar todo lo plantado. Si se cuida, la vegetación estará consolidada en unos dos años más”.
Fuente: www.lavanguardia.com
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