El Consell rechaza repoblar los montes quemados junto a Mariola hasta 2015



Alfafara es uno de los municipios que resultaron más
afectados por el incendio. JUANI RUZ

Medio Ambiente dice que hay que esperar para comprobar la evolución natural de las 3.200 hectáreas afectadas y que actuar antes podría poner en peligro el ecosistema.

M. VILAPLANA La Conselleria de Medio Ambiente ha descartado repoblar al menos hasta 2015 las 3.200 hectáreas de monte que ardieron hace dos veranos junto al parque natural de la Sierra de Mariola. El departamento autonómico, respondiendo a las críticas vertidas por los ayuntamientos afectados, asegura que hay que esperar para comprobar la evolución natural de la zona, y que intervenir antes podría poner en peligro el ecosistema. El Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM) es la institución que se está encargando de realizar un seguimiento de los rebrotes, con el objetivo de actuar después en consecuencia.
El incendio forestal, registrado entre los días 7 y 8 de setiembre de 2010, arrasó 3.200 hectáreas de monte entre las comarcas de El Comtat y la Vall d'Albaida, sobre todo en esta última zona. El fuego afectó a los términos municipales de Ontinyent, Albaida, Agullent, Benissoda, Bocairent, Agres y Alfafara, y las llamas pudieron controlarse a apenas dos metros del parque natural de la Sierra de Mariola.
Tal y como informaba este diario, alcaldes y representantes municipales de los citados municipios celebraban el pasado lunes una reunión en Ontinyent, en la que criticaban la inhibición de la Conselleria de Medio Ambiente en este asunto, y anunciaban su intención de empezar a actuar por su cuenta. Para ello, esgrimieron un estudio que revela un bajo índice de rebrotes y de germinación de semillas en las zonas afectadas por las llamas, circunstancia ésta que se atribuye a la escasez de precipitaciones en el otoño posterior al incendio.
La Conselleria, sin embargo, ha rebatido estas críticas, asegurando que no tiene previsto intervenir en la zona al menos hasta 2015. Fuentes del departamento autonómico explicaron a este diario que tras la reunión se mantuvieron varias reuniones con los alcaldes y que se decidió actuar a corto plazo para retirar la madera quemada y prevenir de esta forma las plagas -cosa que, aseguran, se ha hecho-, y esperar al menos cinco años para comprobar la evolución de la zona antes de decidir repoblaciones. Desde la Conselleria se afirma, además, que los ayuntamientos se mostraron en ese momento de acuerdo con este plan.
A la hora de justificar esta tardanza en la reforestación, las mismas fuentes aseguran que es necesario comprobar cómo evoluciona la zona tras el incendio y si las distintas especies vegetales empiezan a rebrotar dentro de dicho plazo. De hecho, añaden, actuar antes de tiempo podría ser perjudicial, dado que se corre el peligro de modificar el ecosistema.
El Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo es la entidad que se está encargando de realizar un seguimiento del área incendiada, para después actuar en consecuencia. Cabe reseñar que el CEAM, impulsado por el Consell y Bancaja, es un centro de investigación aplicada, con una unidad asociada al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), y que desde 2010 está adscrito a la Universidad Miguel Hernández. Su principal actividad está relacionada con el estudio de los problemas medioambientales.

Por su cuenta
Los ayuntamientos afectados por el incendio han mostrado su intención de empezar a efectuar repoblaciones por su cuenta, ante lo que consideran una inhibición de la Conselleria de Medio Ambiente. Así, y tal y como ya se informó, entre el 20 de febrero y el 2 de marzo los alumnos de tercero y cuarto de Primaria de los municipios afectados trabajarán en la confección de unas bolas de arcilla a las que se incorporarán las semillas de diferentes especies vegetales que serán esparcidas en la zona quemada mediante avionetas.
Asimismo, el 25 de febrero habrá un almuerzo vecinal en la Font Jordana de Agullent, donde se confeccionarán más bolas de arcilla y se explicará, por parte de expertos en esta técnica, las ventajas de su aplicación. El objetivo es esparcir las semillas a principios del mes de marzo.
Los ayuntamientos han expresado su preocupación por el bajo índice de rebrotes registrado hasta la fecha en el área afectada por el incendio. Cabe destacar, además, el caso de Alfafara, población en la que se ha quemado una tercera parte de su término municipal, y cuyo alcalde ha venido reivindicando a la Conselleria de Medio Ambiente algún tipo de intervención para acelerar al máximo posible el proceso de regeneración.

Fuente: www.diarioinformacion.com