El coral naranja, endémico del Mediterráneo suroccidental, es una especie catalogada en España como amenazada. Por tercer año consecutivo, se constata su reproducción sexual en nuestras costas.
El coral naranja o coral estrellado (Astroides calycularis), es una especie endémica del Mediterráneo suroccidental que habita fondos rocosos entre el límite superior de marea y los cincuenta metros de profundidad, donde puede llegar a recubrir hasta el 90% del sustrato, ofreciendo paisajes espectaculares de color anaranjado para los submarinistas.
En el litoral ibérico, la especie se distribuye entre Rota (Cádiz) y Cabo de Palos (Murcia). Incluida en el Catálogo Español de Especies Amenazadas como "Vulnerable", aún se desconocen muchos aspectos vitales de su biológía y ecología.
En 2008, desde la Asociación Hombre y Territorio se realizó un estudio gracias al cual se pudo conocer que las actividades lúdicas pueden afectar al coral naranja cuando son realizadas de forma intensiva por usuarios que no conocen la especie (ver Quercus 281, pags.28 a 33). Este trabajo dio lugar a una campaña de divulgación en centros y clubes de buceo, así como a submarinistas.
Para continuar con el conocimiento del coral naranja, se está estudiando su ciclo de vida en el litoral andaluz, donde se distribuye la mayor parte de su población ibérica. Pues bien, por tercer año consecutivo se ha podido constatar la reproducción sexual de la especie (los corales tienen también reproducción asexual).
Cuando las colonias son fecundadas, las larvas se desarrollan en el interior de los pólipos y se desplazan a los tentáculos, donde son liberadas. La larva permanece en el medio hasta que se asienta en el sustrato, reptando por el mismo hasta encontrar una superficie idónea para crear el primer pólipo, que dará lugar posteriormente a la colonia, ahí ya de forma asexual.
Hemos establecido tres condiciones ambientales que parecen repetirse en la liberación de las larvas: (1) el fotoperiodo, que tiene lugar a finales de la primavera y principios del verano, (2) la temperatura de la columna de agua, que debe alacanzar los 18ºC y (3) el período lunar (en los últimos tres años los pólipos han liberado las larvas en luna llena).
La aportación de estos datos ayudará a la gestión de áreas con una intensiva actividad y a la especie en cuestión.
Autores: Alejandro Terrón, Patricio Peñalver, Lucas Moreno y David León, biólogos y buceadores que forman parte de la Asociación Hombre y Territorio.
Revista Quercus 307.
Nueva página Web: http://www.hombreyterritorio.org/
Fe de errata: en la noticia (16-09-11) sobre Jornadas Red Natura 2000 marina, la fecha de celebración es 21, 22 y 23 de septiembre.
Fuente: www.reservasmarinas.net
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